Gracias.

Un nuevo panorama de esperanza se vislumbra en el horizonte tras los resultados de las elecciones generales del 20 de Noviembre. La confianza con la que nos ha honrado el pueblo español en general y el pueblo isleño en particular, nos ha llenado a la vez de una enorme satisfacción y un enorme sentido de responsabilidad ante la ingente tarea que hay que llevar a cabo. En el ámbito local, un mínimo estudio de los resultados del escrutinio en nuestra localidad debería hacer recapacitar a la señora alcaldesa para abandonar esa prepotencia con la que actúa, para adoptar un nuevo talante menos excluyente y más dialogante que consiguiera implicar a todos los sectores de la población en la consecución de un único objetivo que es la mejora de las condiciones de vida de nuestros conciudadanos.

Porque, ya han pasado más de cinco meses desde las últimas elecciones locales de las que salió el actual consistorio compartido y aparte de múltiples brindis al sol con mociones para salir del paso de un pleno, en cuanto a mociones o planes con un objetivo claro de mejora de Isla Cristina, en cualquiera de sus múltiples vertientes posibles, nada de nada. Una alcaldesa en trámites de retirada y un vice alcalde en vías de retiro.

Todas las fuerzas y supuesto saber se concentran en poder pagar la ingente nómina de los trabajadores municipales. Loable y valiosísima labor, a la que prestaremos todo el apoyo del que seamos capaces. No hay dinero, ni por lo visto capacidad ni tiempo, para ninguna otra actividad municipal. Tantos liberados y tanto gran sueldo digno del mejor de los directivos de gran empresa y nada. Ningún proyecto que ilusione, que motive a la ciudadanía; ningún plan de mejora de la actividad turística, empresarial, de limpieza, de modernización o de cercanía y solidaridad con los ciudadanos, con objetivos claros y cuantificables que permitan medir su grado de cumplimiento. En la visión más optimista, estamos en el mismo sitio, parados en la misma vía desde hace ya varios años, resignados y sin ilusión. Lo peor es que, a tenor de la subida de impuestos municipales que nos espera y de las actitudes vistas en estos primeros meses de gobierno municipal, todo es susceptible de empeorar.

Señora alcaldesa, tiene un gran pueblo. Aprovéchelo y déjese ayudar. Pida colaboración. Explique los problemas y hablemos de sus posibles soluciones. Sin ideologías. Como isleños. Nos irá mejor a todos. Es la única solución. Nosotros estamos dispuestos. ¿Y usted?